La agencia de Migración de Estados Unidos ICE iniciará el domingo redadas masivas de familias de migrantes que han recibido órdenes de deportación a partir de este domingo, por órdenes del presidente Donald Trump, aseguraron hoy medios estadounidenses.
El operativo de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) está programada a unas 2,000 familias que enfrentan órdenes de deportación en diez ciudades estadounidenses incluidas Houston, Chicago, Miami, Los Ángeles y otras principales destinos de inmigración, según reporta el diario The Washington Post.
El secretario interino del Departamento de Seguridad Interna (DHS), Kevin McAleenan aparentemente desearía que ICE realizara una operación más específica y enfocada que buscaría detener a un grupo de alrededor de 150 familias que recibieron abogados pero abandonaron el proceso legal y se fugaron. Las dudas de McAleenan sobre las redadas también fueron reportadas por CNN.
Trump habría determinado seguir adelante con la operación familiar después de tuitear el lunes que las redadas de inmigración se realizarían "la próxima semana" como un primer paso hacia su promesa de "millones" de deportaciones. La Casa Blanca ha estado en comunicación directa con el director interino de ICE, Mark Morgan, y otros funcionarios de ICE, eludiendo a McAleenan, dijeron tres funcionarios, siempre según el Post.
ICE ha estado preparando agentes y equipos para la operación, que se espera que se desarrolle a lo largo de varios días a partir del domingo por la mañana, dijeron los funcionarios. Las discusiones sobre el alcance de la operación continuaron el viernes en ICE, DHS y la Casa Blanca, dijeron dos funcionarios.
La agencia planea usar las habitaciones de los hoteles como áreas de almacenamiento temporal para detener a padres e hijos hasta que todos los miembros de una familia estén juntos y listos para la deportación. Los funcionarios también reconocen que pueden arrestar a personas que no pueden deportar de inmediato, conocidas como "arrestos colaterales", y es probable que liberen a las personas con dispositivos de monitoreo de tobillo.