Dos personas murieron a tiros y unas 20 resultaron heridas ayer en Honduras durante protestas para pedir la renuncia del presidente Juan Orlando Hernández.
“Miembros de Medicina Forense hicieron el levantamiento de dos cadáveres” entre las personas trasladadas al Hospital Escuela de la capital por los incidentes de la noche del miércoles y madrugada de ayer, dijo a la AFP la portavoz del Departamento Médico Legal del Ministerio Público, Isis Alvarado.
Las víctimas mortales fueron identificadas en el hospital como Luis Enrique Maldonado Vásquez, de 24 años, y Erick Francisco Peralta Mendoza, de 37, ambos con heridas de bala.
Las muertes se registraron durante la intervención de policías y militares para dispersar a miles de personas que bloquearon calles y saquearon una decena de negocios de electrodomésticos y comestibles en zonas de Tegucigalpa.
Diana Rodríguez, de 49 años, dijo a la AFP que su hermano, Erick, era un taxista. “Se bajó de su carro en una toma para pedir que lo dejaran pasar, pero llegaron policías militares a disparar y lo mataron”, explicó.
Según informes policiales, seguían bloqueos de carreteras con neumáticos encendidos, piedras y palos en la capital y otras ciudades, como San Pedro Sula, La Ceiba, Choluteca y Colón.
En algunos sectores, los manifestantes fueron desalojados por policías pero se mudaron de lugar, impidiendo la circulación de vehículos.
Vitalino Alvarez, portavoz del movimiento campesino del Valle del Aguán, en costa caribeña nororiental, denunció desde esa zona que “policías y militares están desalojando a la gente” a balazos, en unos 20 bloqueos en el departamento de Colón.
“Han herido de bala a un muchacho porque este dictador (Hernández) ha dado órdenes de disparar. La situación se va a agravar porque tenemos que defendernos, no nos vamos a dejar matar”, afirmó.
Presidente responde
El presidente Hernández convocó ayer una reunión del Consejo de Seguridad, integrado por los líderes de los tres poderes del Estado, Fuerzas Armadas y policía, para adoptar acciones contra los manifestantes.
Al terminar el encuentro anunció el despliegue de las Fuerzas Armadas para impedir bloqueos en las carreteras y proteger la propiedad privada y pública.
Las fuerzas especiales de la policía se pusieron en paro el miércoles y ayer para protestar por las jornadas laborales extenuantes que afrontan desde el inicio de las manifestaciones contra el gobierno, hace cerca de un mes.
Médicos y docentes, apoyados por estudiantes y habitantes, iniciaron ese movimiento para protestar por dos decretos gubernamentales que, en su criterio, privatizan la salud y la educación.
Los gremios y el gobierno, que rechaza cualquier intento de privatización, y han emprendido diálogos por separados para elaborar propuestas de mejora de los dos servicios en Honduras.
2. Instruir el despliegue nacional de FFAA, Policía, Inteligencia y órganos que dependen del Ejecutivo para garantizar el derecho a la libertad de locomoción, protección de propiedad privada/pública y desde luego la protección de integridad de la población.
— Juan Orlando H. (@JuanOrlandoH) 20 de junio de 2019