El fenómeno de El Niño apareció en El Salvador y ha provocado una sequía débil, una situación que de no revertirse en las próximas semanas obligará a prorrogar la siembra hasta agosto, indicaron ayer productores agrícolas.
El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) anunció este miércoles la aparición de una sequía meteorológica débil.
La cartera de Estado informó que desde el 13 de junio se contabilizan hasta siete días secos consecutivos en algunas zonas de La Unión, Morazán, San Miguel, todo Usulután y parte de San Vicente y La Paz.
También hay sequía débil en ciertas localidades de Ahuachapán, Sonsonate y La Libertad. En el resto del país se reportan menos de cuatro días secos consecutivos.
El MARN explicó que la sequía es débil cuando se acumulan entre cinco y 10 días consecutivos sin lluvias. La intensidad aumenta a moderada si se alcanzan entre 11 y 15 días, mientras que si supera los 16 días ya se considera fuerte.
“Las condiciones actuales de humedad en el suelo se ubican en la categoría de muy seco a seco, en el sur de La Unión y San Miguel. El resto del territorio está normal, húmedo o muy húmedo”, indicó el ministerio en un informe especial.
Entre las causas de esta disminución en las lluvias está la presencia débil del fenómeno de El Niño, un ligero enfriamiento en las aguas del Caribe, presión atmosférica ligeramente alta y la llegada desde África de vientos muy acelerados, que atraviesan el Océano Atlántico y arrastran polvo del Sahara. También contribuye el ambiente caluroso y brumoso, indicó la fuente oficial.
La condición del viento “continuará acelerada por una semana más sobre el territorio oriental del país, ocasionando una disminución en la cantidad de lluvia, especialmente en la zona paracentral y oriental”, dijo el MARN.
Atrasarían la siembra
En abril pasado, el Foro del Clima de América Central y el Foro Hidrológico de América Central pronosticaron la aparición de una sequía entre junio y julio.
Por ello la actual sequía es un fenómeno que ya esperaba el sector agropecuario y por eso ya había decidido esperar hasta la última semana de junio para iniciar los trabajos del ciclo agrícola 2019/2020.
Aunque algunos productores comenzaron a sembrar con el inicio de la temporada lluviosa en mayo, el actual período seco no es suficiente para hablar de pérdidas, indicó ayer la Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Campo).
La gremial recomendó a inicio del ciclo agrícola aplazar los trabajos de campo a la espera que la sequía iniciara el 15 de junio. Luis Treminio, presidente de la Cámara, aseguró que si el ciclo de sequía se rompe entre el 24 y 25 de junio próximo, los productores comenzarán de inmediato los cultivos.
Sin embargo, advirtió que si la sequía se prolonga la próxima semana, los productores están dispuestos a no cultivar hasta agosto. Explicó que la decisión responde a que se espera un nuevo período seco para la última semana de julio y en este mes también se presenta la canícula.
“Si se normaliza y empieza a llover de aquí (ayer) en tres días, los productores perfectamente pueden sembrar, previendo la canícula de julio. La otra semana es clave”, añadió el productor.
Un fenómeno que ya es habitual
Sequía extrema
En 2018, los productores agrícolas se enfrentaron a una de las sequías más extremas registradas en el país, porque se prolongó hasta por 40 días en algunas regiones, según los registros del Ministerio de Medio Ambiente.
Estragos
Esta ausencia de lluvias dejó $42.3 millones en pérdidas por la afectación de 2.8 millones de quintales de granos básicos, según datos recolectados por el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) durante el año pasado.